(360 palabras) En su famosa novela "Crimen y castigo" F.M. Dostoievski reflejó la profunda crisis social de su tiempo. En el ejemplo de un joven ordinario, Rodion Raskolnikov, el escritor reflejó las nuevas opiniones que prevalecían entre los jóvenes. El epílogo desempeña un papel importante en la narrativa en el que el autor finalmente desacredita los ideales de su héroe, mostrando a las personas otro camino correcto, en su opinión.
En el epílogo, Rodion aparece ante nosotros después de haber confesado voluntariamente su crimen. El héroe fue a esto para calmar su conciencia. Habiendo cometido el asesinato con un buen propósito, se dio cuenta de que no podía soportar esta carga solo. El castigo fue eliminar su culpa y ayudarlo a renacer para una nueva vida, pero vemos que esto no sucedió. Incluso en el exilio siberiano, Raskolnikov no abandona su teoría sobre la superioridad de unas personas sobre otras. Decepcionado consigo mismo, continúa aferrándose desesperadamente a sus errores, y continúa dividiendo a las personas en "criaturas temblorosas" y "correctas", la única diferencia es que ahora se refiere al primer grupo. Como resultado, congelado en el desprecio por quienes lo rodean y por él mismo, despierta el odio de otros convictos, pero, lo más importante, aleja a Sofya Marmeladova de sí misma, que fue a Siberia para seguirlo, con la esperanza de salvarlo y regresar a Dios. Dostoievski nos muestra cuán destructivo puede ser el orgullo humano, cómo, por temor a admitir sus errores, una persona se destruye a sí misma. Sin embargo, el autor no podía permitir que su héroe se equivocara durante toda su vida. Raskolnikov cae enfermo y tiene fiebre en su sueño, lo que le demuestra completamente el defecto de su teoría. La humanidad fue golpeada por triquines microscópicos, todos los que tocaron creyeron con su propio genio y exclusividad. El mundo se sumió en el caos cuando las personas llenas de odio hacia los demás, incluso sin tratar de encontrar un lenguaje común, comenzaron a matarse entre sí. Según Dostoievski, un hombre que ciegamente se considera superior a los demás solo siembra destrucción y muerte a su alrededor. Debemos luchar por la igualdad, no por la exaltación personal, de lo contrario la civilización desaparecerá. Tras recuperarse de su enfermedad, Raskolnikov finalmente renuncia a sus opiniones pasadas. Echa un nuevo vistazo al mundo y renace. Al abrirse a Sonya y a toda la humanidad, el héroe da el primer paso en su camino de redención.
Es en el epílogo que Dostoievski finalmente destruye las teorías nietzscheanas e individualistas de su tiempo, llevándolas a reemplazar la bondad, la fe en las personas y en Dios.